Alma (y su casita de muñecOs). Fragmento
FRAGMENTO dedicado a los soñadores, a los que no necesitan ver para creer, a los que no han perdido la esperanza.
«Al fin y al cabo, ¿qué es la realidad? ¿No se reduce el Universo a un baile continuo de partículas que se organizan y desorganizan a su aire siendo además tan pequeñas que ni siquiera se pueden percibir? Estaba claro que las partículas que conformaban la realidad de Alma no bailaban al mismo ritmo que las suyas, pero ¿qué importancia podía tener eso?, ¿quién tenía razón?, ¿quién seguía la melodía adecuada?, ¿cuál es la melodía adecuada?, ¿quién toca el instrumento? Pandora no creía en todo lo que veía y pasaba mucho tiempo entre nubes soñando con un mundo más amable, escapando del baile de su «partículas» que se empeñaban en mostrarle humillación y abandono. No se fiaban de sus sentidos, no quería fiarse de ellos, prefería creer que más allá de todo lo que se puede percibir existe algo inmenso, un lugar repleto de abundancia y libertad, la morada de las soluciones. Estaba convencida de que tan solo su incapacidad debido al hecho de ser humana le impedía bucear en un lugar tan maravilloso, pero en cuanto se desprendiera de su cuerpo, iría derechita hasta allí».